
Simplificar las tareas y cometidos de los directores de centros educativos en el combate contra el acoso escolar, con carácter general, es uno de los objetivos del plan de la Generalitat catalana, que ha resuelto reducir de cuatro a uno los protocolos previstos de actuación.
Se trata de los protocolos de Acoso y Ciberacoso, Violencia machista, Odio y discriminación, y LGBTI. De este modo, cuando haya que activar un protocolo, consultar los circuitos de intervención o conocer los recursos existentes, los profesionales dispondrán de un único marco común que los facilitará y agilizará el trabajo.
Por lo tanto, los centros ya no tendrán que diagnosticar cuál es el protocolo adecuado para cada circunstancia, dado que será el mismo documento que lo tipificará.
El Departamento de Educación, además, multiplicará por 10 los recursos dedicados en los dos programas que dispone de sensibilización hacia el acoso: el programa de prevención #aquíproubullying y el Enfoque Restaurativo Global y garantizará que todos los centros hayan hecho formación en prevención del acoso los próximos dos cursos.
Así pues, impulsará estos dos programas con recursos específicos y herramientas formativas. Para un centro, asumir estos programas representa un trabajo y un compromiso de 3 años para acabar cambiando su cultura en relación al acoso. La inversión pasa de 150.000 euros a 1,5 millones el próximo curso.
También se implantará a partir del curso próximo la figura del coordinador de coeducación, convivencia y bienestar en todas las escuelas e institutos de Cataluña. Los coordinadores, que será un docente del centro, recibirán formación del Departamento de Educación y su tarea será la de coordinar en materia de convivencia, coeducación y bienestar/malestar del alumnado. Esta figura está prevista en la LOPIVI -Ley Integral de Protección a la Infancia y la Adolescencia frente a la Violencia-, aprobada el junio de 2021.
Al margen de la participación de los centros en los dos programas específicos sobre acoso, todo el alumnado de 1.º de ESO llevará a cabo una formación de sensibilización sobre el acoso, que organizará el Departamento. Además, dentro del plan Las escuelas libres de violencias, cada centro habrá de tener referentes de convivencia entre el alumnado, una figura esencial para combatir el acoso entre iguales.
Por último, destaca también como novedad por el curso que viene la implantación del Registro de Violencias contra el Alumnado (REVA). El REVA es una base de datos de nueva creación que permitirá sistematizar el registro de las situaciones de violencia que vive el alumnado.