
Las responsabilidades se pagan. Pero, ¿compensan? Los directores de centros educativos de Secundaria en España suelen tener un salario mínimo de 51.826 euros en el inicio de su carrera docente, cuando asumen estas responsabilidades. Este salario es un 25,3 por ciento superior al de otros docentes que solo se dedican a la docencia. Datos interesantes si se comparan con los salarios generales de los docentes.
En los otros países de nuestro entorno ocurre lo mismo, aunque las diferencias porcentuales son superiores. En el caso de la media de la OCDE, el salario inicial del director ronda los 45.115,57 euros. Esto significa que supera en un 45 por ciento al salario de los docentes. La media de los países de la UE23 baja hasta los 43.017 euros, por lo que suelen cobrar un 38 por ciento más que los docentes sin tareas de dirección. “No obstante, en valores absolutos el salario inicial en España supera el de la media de la OCDE y la UE23”, según El Panorama de la Educación.
Directores con más veteranía
Los directores de las primeras etapas de Educación Secundaria también tienen un salario superior al máximo del profesorado. Los países de la OCDE presentan como media salarios superiores a los 77.800 euros, que significan ganar un 47,8 por ciento más que el resto de docentes. Para los países de la UE23 el salario máximo de los directores es de 73.150 euros en la UE23, un 40,8% más que otros profesores.
“España en este caso tiene un salario máximo similar al de las medias internacionales, 77.400 euros, que representa un 32,1% más que el salario máximo de un profesor del mismo nivel educativo”, se afirma en el informe.
Los países con mayores diferencias entre el salario inicial de un profesor y de un director son Italia (129,1% superior), Estados Unidos (125,1%) y México (119,6%). Sin embargo, el escenario es diferente cuando se considera el salario máximo que un director puede alcanzar frente al de un profesor en el nivel de primera etapa de Educación Secundaria. En este caso, las mayores diferencias se dan en Inglaterra (183,1%), México (173,9%) y Chile (114,7%).