
Se llama Pablo Fernández, es salesiano, deja la tiza en las aulas y se jubila a los 86 años después de haber trabajado más de 60 como docente. Don Pablo, como le conocen de manera cariñosa los alumnos, ha impartido sus últimas clases en el Centro Educativo salesiano María Auxiliadora de Salamanca.
El 29 de noviembre le rindieron homenaje en una emotiva despedida organizada por un grupo de alumnos y antiguos estudiantes con una una entrañable frase del fundador de los salesianos San Juan Don Bosco: “La enseñanza que deja huella no es la que se hace de cabeza a cabeza, sino de corazón a corazón”. Mientras que Don Pablo aseguraba que el secreto de su éxito como profesor de Filosofía había sido querer a sus alumnos y orientarles de la mejor manera posible para la vida.
En conversación con ÉXITO EDUCATIVO, Pablo Fernández ha asegurado que aunque no le gustan demasiado los homenajes y que “fue una encerrona” que al final agradeció enormemente el reconocimiento; “no tanto por el homenaje en sí, sino por venir de la base, de los alumnos”, añadía.
Este profesor octogenario nos ha contado, además, con numerosas referencias a personajes filosóficos, que el sistema educativo actual y el anterior no se puede comparar. Piensa que debería existir un gran Pacto por la Educación para mejorar, y, aunque ve con cierto pesimismo el futuro de la educación, considera que los docentes pueden hacer mucho por los alumnos y que los jóvenes tienen un fuerte poder rejuvenecedor: “Si yo hasta la edad en la que he dado clase lo he hecho con satisfacción enorme y con la aceptación de los alumnos, es porque me han aportado ese contacto rejuvenecedor”.
Ahora este recién jubilado, vallisoletano de nacimiento pero salmantino de adopción, quiere descansar, ayudar a quién lo necesita a través del ejercicio del voluntariado y también quiere retomar cierta relación con la Universidad.
En los próximos días, ÉXITO EDUCATIVO publicará la entrevista al completo que mantuvo con Pablo Fernández en el que se tratan asuntos relacionados con su carrera docente, recuerdos imposibles de olvidar y aspectos que tienen que ver con el futuro de la educación.