Galicia premia las buenas prácticas sobre educación inclusiva

Los premios por clasificación han sido de 5000, 2500, 1000 y 500 euros.

La Consejería de Educación, Universidad y Formación Profesional de Galicia ha reconocido a ocho centros educativos en los ‘Premios a las Buenas Prácticas de Educación Inclusiva’. La finalidad de estos galardones es promover y difundir proyectos que centran la atención en la diversidad y la inclusión dentro de las primeras etapas del sistema educativo.

Los centros participantes han sido premiados por categorías y publicados por la Junta de Galicia en el denominado como Portal Educativo. Los vencedores han percibido 5.000, 2.500, 1.000 y 500 euros, según la posición en la que han resultado finalmente clasificados. Los primeros puestos los han logrado en Infantil el CEIP Luis Seoane de Oleiros y en Secundaria el IES Manuel Murguía de Arteixo, ambos de La Coruña.

El resto de premios han recaído, en la modalidad de Infantil y Primaria, la segunda posición, en el CEP Pilar Maestu Sierra de A Pobra do Caramiñal (La Coruña), el tercero, en el CEP de Quiroga (Lugo) y un premio accésit para el CEIP Gregorio Sanz de Ribadeo (Lugo).

También hubo premios para los centros de enseñanza secundaria. Por una parte, el IES Montecelo de Pontevedra se hizo con el segundo puesto mientras que el EPAPU de Monterroso recibió el tercero y el accésit fue para el IES Miguel Ángel González Estévez de Vilagarcía de Arousa (Pontevedra).

Los proyectos ganadores

Evitando las desigualdades y tratando de garantizar los estímulos de las capacidades de todo el alumnado, los proyectos que han sido reconocidos se describen de la siguiente manera:

CEIP Luis Seoane (Oleiros-A Coruña). Su proyecto tiene como objetivo la inclusión de todo el alumnado y, en concreto, del alumnado con necesidades educativas especiales, ya que observaron que su participación en la vida del centro era muy limitada. El desarrollo de este proyecto en el centro implicó la participación activa y voluntaria del alumnado de quinto y sexto de primaria.

CEP Pilar Maestu Sierra (A Pobra do Caramiñal-A Coruña). Bajo el título ‘La escuela con la que soñamos y soñaremos’ basaron su buen hacer en la participación activa de las familias, queriendo a los niños y niñas felices. Es decir, una escuela que acoge la diferencia, en la que todas las capacidades son bienvenidas, y que construye a entornos seguros y acogedores.

CEIP de Quiroga (Quiroga-Lugo). Su proyecto hace hincapié en el diálogo y la ayuda entre todos los miembros que forman parte de su comunidad educativa como instrumentos favorecedores de la inclusión y de la convivencia.

CEIP Gregorio Sanz (Ribadeo-Lugo): El proyecto desarrolla acciones que fomentan que todo el alumnado juegue en los tiempos de ocio, favoreciendo la igualdad de oportunidades e incrementando la responsabilidad y tolerancia a través de la figura de los superdinamizadores y de las superdinamizadoras (que es el propio alumnado) y con otras acciones que tienen por finalidad sensibilizar, visibilizar y normalizar la realidad del centro. Entre ellas figura que el alumnado aprenda la lengua de signos española.

IES Manuel Murguía (Arteixo-A Coruña): Proyecto que tiene a la música y al cine como hilo conductor para la inclusión; desarrollan un proyecto social que fomenta la igualdad y la no discriminación y que sirve para compensar las desigualdades personales, culturales, económicas y sociales presentes en la realidad del centro.

IES Montecelo (Pontevedra): La enseñanza de formación profesional básica es la que más influencia tiene sobre la vida del centro, por lo que pusieron en práctica un modelo educativo que tiene en cuenta las potencialidades y el bienestar emocional del alumnado para favorecer el acceso a nuevas oportunidades de aprendizaje que le permita y facilite el camino hacia el mundo laboral.

EPAPU de Monterroso (Monterroso-Lugo): Partiendo de su realidad como centro penitenciario, su proyecto se centra en crear un entorno de aceptación en el que se generen conductas sociales responsables, solidarias y respetuosas, promoviendo la tolerancia, la libertad, la justicia, la igualdad entre hombres y mujeres y el respeto por los derechos de todos y todas; colaborando con asociaciones sin ánimo de lucro, centros de formación y otros.

IES Miguel Ángel González Estévez (Vilagarcía de Arousa-Pontevedra): ‘Marzo sin fronteras’ es un proyecto que se viene desarrollando desde lo curso 2014/15 dentro del marco curricular de alguno de los módulos del ciclo superior en Animación de Actividades Físicas y Deportivas y en colaboración con el profesorado y alumnado de la ESO. Este pretende fomentar la participación en la actividad física y el deporte de las personas con discapacidad, favoreciendo de este modo la inclusión social.

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