
La FAPA Giner de los Ríos ha denunciado que la Comunidad de Madrid haya anunciado, como novedad, la inversión de 130 millones de euros en la licitación de obras. Unas infraestructuras que, en principio empezarán a dar servicio a lo largo del próximo curso 2023/24.
Sin embargo, según explica en un comunicado la asociación de padres, “casi el cien por cien de los centros anunciados llevan retraso en su construcción y o ampliación, algunos incluso más de diez años”. Son decenas de centros, de los que cita algunos ejemplos.
Es el caso del IES Malala Yousafzai (Madrid), que, después de prácticamente una década demandándolo la FAPA, abrió sus puertas en 2018, un año más tarde de lo previsto y con alumnado desplazado hasta la apertura en un centro privado concertado. Cinco años después “aún sigue en obras”.
Respecto al CEIP María de Villota, estuvo tres años funcionando administrativamente, durante ese tiempo se desplazó al alumnado a otro centro educativo, situado en la UVA de Vallecas. “Esta figura es la de creación jurídica del centro, popularmente conocidos como centros fantasmas”, deplora la FAPA, que asegura haberlo denunciado en reiteradas ocasiones, votando en contra a su paso por el Consejo Escolar de la Comunidad de Madrid y emitiendo votos particulares al respecto. El centro, sigue en obras.
La conocida como “La Nevera” del IES Ramiro de Maeztu lleva esperando desde el Consejo de Gobierno del 2021 en el que se aprobó la declaración de tramitación de emergencia de la contratación de obras de demolición, debido a la acumulación de nieve con la borrasca Filomena. “Estamos en 2023”, ironiza la FAPA en su comunicado.
En relación con el IES Rafael Frühbeck de Burgos, de Leganés, abrió sus puertas en 2014. Año tras año la comunidad educativa “sigue viviendo pendiente” de las obras de ampliación. Ya han pasado 9 años y continúa.
En la misma localidad madrileña está el CEIP Gabriela Morreale. Su alumnado, docentes y familias conviven desde 2018 con las obras. “Desde sus ventanas son testigos en primera persona de los vaivenes de las grúas, material de obra y vallas anexas a sus pabellones”.
El CEIP Margaret Thatcher abrió en 2015, “ya entonces con dos años de retraso” respecto a la fecha prevista de apertura, tiempo en el que el alumnado estuvo desplazado en otro centro educativo. Por cierto, apunta la FAPA, la comunidad educativa acordó llamarlo CEIP Nuevo Barajas, pero la Consejería no lo respetó. “En 2021 aún no estaban terminados ni el patio, ni el gimnasio, ni la sala multiusos. Ocho años después de su apertura, el centro sigue en obras”.
El listado continúa con el IES Ana Frank, una infraestructura que “se lleva solicitando desde hace ya veinte años por parte de la comunidad educativa”. Inició su funcionamiento en otro centro educativo, “ya que, cómo no, la infraestructura no estuvo preparada”. La finalización de la obra, anunciada en 2018, estaba prevista para el curso 2022/2023; “de nuevo, se volvió a incumplir el plazo”, lamenta la FAPA.
Respecto al Conservatorio Teresa de Berganza, el Ayuntamiento se comprometió a ceder la parcela en 2018 y la Comunidad de Madrid se comprometió a tenerlo construido en 2022, “cosa que no ha sucedido”.
El alumnado del IES Torcuato Fernández Miranda de Arroyomolinos está desplazado en otro instituto. El Ayuntamiento cedió el terreno en 2020 para su construcción. La Consejería recurrió de nuevo a la creación jurídica del centro, “generando falsas expectativas en las familias”. La situación real es la “masificación” del centro que ahora les acoge, con gran parte del alumnado en aulas prefabricadas, sin gimnasio, biblioteca, ni aula de informática.
Respecto a los centros de Educación Especial públicos, explica que “sólo” hay 33 en la región, frente a los 40 privados concertados, de acuerdo con datos del curso 2019-2020. La Federación ha presentado enmiendas en el pleno del Consejo Escolar de la Comunidad de Madrid respecto a la ampliación de la red pública, constantemente, “y ahora, en periodo electoral, se anuncia”.
El Consejo de Gobierno aprobó en 2021 la contratación de la obra de un centro de Educación Especial público en Valdemoro. Se han ido “arrastrando retrasos constantes” y, hoy en día, se encuentra en obras.