
En los últimos años, la formación profesional (FP) ha experimentado un importante auge en España. La demanda de profesionales cualificados en diversos sectores ha aumentado, y la FP se ha convertido en una opción atractiva para muchos estudiantes y profesionales en busca de una educación más práctica y orientada al empleo.
Teniendo en cuenta que España es el segundo país de la UE con mayor tasa de universitarios en paro y que el mercado exige un cambio en la formación de determinados sectores se ha producido un cambio de percepción y reconocimiento de la FP como una opción muy válida comparativamente con la educación universitaria. Una reflexión que concuerda con los datos deslizados por el Observatorio de la FP de CaixaBank. El estudio expone que el 25% de los graduados en la universidad de 35 años o más se matricula después en FP.
Actualmente existe más de un millón de estudiantes formándose en FP, donde la Formación Profesional de Grado Superior ha crecido un 43,3% en los últimos cinco años, teniendo en cuenta que para septiembre de 2023 aumentará esta cifra en casi 60.000 alumnos más en un sólo curso.
Además de la FP tradicional, la FP DUAL ha ganado un gran espacio en determinados sectores donde las prácticas en empresa se acompañan de formación. No podemos olvidar que tras la pandemia, la formación a distancia se ha incrementado fuertemente llegando ya a más del 20% del total de alumnos de FP.
Además, la situación económica y laboral ha influido en esta tendencia. A medida que España se ha recuperado de la crisis económica, se ha generado una demanda creciente de profesionales especializados en sectores como la tecnología, la industria, la hostelería o la salud proporcionando una formación específica y práctica que prepara a los estudiantes para incorporarse rápidamente al mercado laboral.
Además, en los últimos años se está produciendo una fuerte reconversión del ámbito empresarial de la formación profesional, que como el resto del sector educativo está atomizando las estructuras tradicionalmente familiares para agruparse en grandes bloques empresariales, o de inversiones de fondos de capital riesgo que están produciendo una catarsis en el crecimiento de la formación profesional a nivel nacional.
Compañías como CCC, CEAC, Medac o Master D han pasado rápidamente a la historia al ser incorporadas a empresas mucho mayores, con una perspectiva empresarial moderna en la que el crecimiento se prevé exponencial en el sector.
No obstante juntamos dos variables de éxito, incremento de alumnos y dinero de inversores privados, para ver cómo en poco tiempo el sector de la FP, con la ayuda de una nueva ley de Formación Profesional, hace que la sociedad perciba una mejora progresiva en el valor aportado por este sector.
No podemos olvidar que España necesitará en 2030 más empleados con estudios de FP que universitarios. Las previsiones de futuro del mercado laboral reflejan un aumento de trabajos en el sector servicios. Los empresarios piden una mayor formación, concreta, específica, práctica y moderna para afrontar este reto que ya está llegando.
¿Qué opinas? ¿La FP sigue siendo de segunda? O tal vez podamos empezar a valorarlo como una opción más que ventajosa en según qué sectores.
Querido amigo qué estás leyendo el artículo, abrimos debate, os leo en comentarios.
Por Enrique Escandón, director del Alameda International School