
El pasado lunes, 12 de noviembre, los responsables de Escuelas Católicas de Madrid (ECM) presentaron su propio programa denominado CONSTRUIMOS CONVIVENCIA. Este proyecto persigue estructurar y dinamizar el fomento de la convivencia en los centros de Escuelas Católicas en la Comunidad de Madrid y, con ello, la erradicación del acoso escolar, mediante una herramienta que se apoya en la prevención y formación del alumnado, y en los instrumentos de detección de la comunidad educativa.
Para José Antonio Poveda, Secretario Regional de Escuelas Católicas de Madrid (ECM), Director de la Asesoría Jurídica de ECM y miembro del Consejo Escolar de Madrid, el principal objetivo del programa es “posibilitar en el centro una ‘cultura de paz’, siendo todos los miembros de la comunidad educativa ‘expertos en humanidad'”. Para lograrlo, el Programa trabajará simultáneamente tres aspectos: la acogida y el sentido de pertenencia, la gestión de las emociones y las habilidades sociales. Asimismo, pretende capacitar a la comunidad educativa para detectar y resolver pacíficamente los conflictos, a través de de un modelo de intervención integrado (punitivo y relacional) y de mediación.
Los centros de la organización que se incorporen a este programa adquirirán unos compromisos mínimos, que se irán ampliando progresivamente, conforme la hoja de ruta que establezca cada centro, con el fin último de lograr una convivencia sostenible para su centro. Para ello, el programa ofrece formación práctica y acompañamiento, espacios para compartir y encontrarse los centros y visibilizar las buenas prácticas.
La convivencia se ha convertido en una aspecto prioritario para mayor parte de los centros, pues no obstante es el criterio más demandado por parte de las familias a la hora de elegir centro como así demuestra el estudio realizado por la Universidad Pontificia de Comillas para las propias Escuelas Católicas y presentado en 2016. La patronal de centros católicos, además, presentó recientemente su propia Guía contra el acoso escolar.