La transformación digital y su gestión es un aspecto de vital importancia en un centro educativo, no solo para que éstos, como cualquier otra empresa, puedan aumentar su competitividad, sino también para que logren adaptarse a los hábitos de comportamiento sociales, que son cada vez más digitales.
Esta adaptación digital pasa por conocer y manejar de forma óptima las nuevas tecnologías, definir estrategias para el ámbito online del centro e introducir a los todos los trabajadores en estas nuevas líneas de desarrollo para que colaboren con la innovación y se formen en estas herramientas.
También, es necesario implementar proyectos digitales que tengan en cuenta las nuevas preferencias de las familias, así como analizar y optimizar los planes de digitalización, a través de la medición de los planes y proyectos planteados dentro de esta transformación digital.
La digitalización no debe confundirse con otras acciones como la mera presencia en redes sociales tipo LinkedIn, Twitter o Facebook, el marketing digital o la creación de tiendas online, tal y como señala Carlos Leyva, responsable de implantación y desarrollo de proyectos CX (Experiencia de Cliente) en Soluciona IT durante un seminario en la Universidad Miguel Hernández.
En los centros educativos hay que conocer los principales beneficios derivados de esta transformación digital y procurar un plan estratégico para su desarrollo, que tenga en cuenta los siguientes aspectos:
- La generación de nuevas experiencias para el cliente.
- Nuevas fuentes de ingresos a través de una oferta más amplia y complementaria.
- Una mejor y mayor capacidad de respuesta ante los cambios que se producen en la sociedad.
- La creación de una ventaja competitiva para la organización frente a otros actores de su mismo sector.
En el ámbito educativo esto último se traduce en completar la oferta educativa establecida desde las administraciones públicas con aquellos contenidos que preparan a los jóvenes para el trabajo profesional y para las diferentes situaciones vitales.
