Los beneficios de la escritura a mano frente al aprendizaje visual para la adquisición de palabras en Primaria es una de las conclusiones a las que llega el estudio realizado por Ying Yang, Zhang Huixin, Wu Yunxia y Li Wenhui que investiga cómo influye la escritura a mano en el aprendizaje del sonido, la forma y el significado de las palabras frente al aprendizaje visual.
Para realizar la investigación, a partir de diferentes pruebas se demuestran mejores resultados en precisión y tiempo de respuesta en cuanto al aprendizaje de palabras según su forma, sonido y significado al emplear escritura manual.
Los hallazgos que encontraron los autores del informe sugieren que la escritura a mano es más efectiva que el aprendizaje visual para la adquisición de palabras, priorizando la forma y el sonido sobre el significado.
Ahora bien, ¿por qué la escritura a mano produce mejores resultados en el aprendizaje? La respuesta a esta pregunta es sencilla y es que se debe a la ventaja motora. Estas son las razones que lo demuestran.
La escritura manual aumenta la atención a las palabras
El sistema motor que se involucra durante el proceso de escritura manual requiere un mayor compromiso atencional frente a otras formas de aprendizaje, como el visual. Esto se debe a que es preciso atender a los aspectos gráficos que conllevan dicha escritura. Así, cuando se aprenden nuevas palabras o secuencias de acciones, se requiere de una cantidad significativa de atención con la escritura a mano.
De esta manera, al escribir a mano, los estudiantes dedican más atención y esfuerzo cognitivo al proceso de aprendizaje, lo que mejora su capacidad para conectar diferentes aspectos de las palabras, como la forma, el sonido y el significado, en comparación con métodos más pasivos, como el aprendizaje visual.
La escritura a mano es el resultado del procesamiento multisensorial
Durante el proceso de escritura a mano, se ponen en juego múltiples sentidos al mismo tiempo, como el tacto (al emplear herramientas como bolígrafos y papel), la vista (al observar lo que se escribe) y la propiocepción (al percibir los movimientos realizados). Esto favorece una conexión más profunda entre la acción que se realiza (escribir a mano) y lo que se percibe (las características de la palabra).
Esta combinación de estímulos sensoriales y motores enriquece las habilidades sensoriomotoras y facilita un aprendizaje más profundo de las palabras al crear asociaciones más sólidas y duraderas entre la información visual, auditiva y motriz. Por ello, la escritura a mano se considera más efectiva que el aprendizaje visual, pues este solo implica el sentido visual.
Con la escritura manual se aprende durante más tiempo palabras
La escritura a mano facilita el aprendizaje de palabras más que el aprendizaje visual, ya que involucra la coordinación entre la percepción visual y los movimientos de la mano. Al escribir, se presta atención a las formas y tamaño de las letras antes de escribirlas, lo que aumenta las fijaciones visuales y el tiempo dedicado a procesar la palabra.
Este tiempo de fijación es lo que diferencia la magnitud del aprendizaje por medio de la escritura a mano de la del aprendizaje visual. Esto se debe a que al escribir a mano se generan fijaciones más largas y frecuentes, siguiendo un patrón secuencial de izquierda a derecha, frente al enfoque en el centro de la palabra que se da con el aprendizaje visual. Así, según va aumentando la familiaridad con las palabras que se aprenden, el tiempo de fijación disminuye, lo que facilita el proceso de escritura.
La escritura a mano requiere un procesamiento visual más detallado
La escritura a mano implica un procesamiento visual más detallado que otros métodos como la mecanografía. En términos de memoria visual, el análisis visual que se realiza al escribir a mano es más profundo, lo que es clave para recordar mejor los símbolos y las formas. Así, en un estudio que compara la escritura a mano, la mecanografía y el «aprendizaje de composición» (una tarea que también requiere análisis visual) en adultos, se encontró que la escritura a mano y el aprendizaje de composición superan a la mecanografía en términos de reconocimiento de símbolos, lo que se corroboró también con niños en edad preescolar.
En definitiva, los autores del informe identifican diversas razones por las que es beneficiosa la escritura a mano para aprender palabras, como son un mayor enfoque de la atención, la utilización de un procesamiento multisensorial, siendo el visual más detallado y un mayor tiempo de fijación y procesamiento de la palabra. Por ello, en cuanto a tiempo de respuesta y precisión según la forma, el sonido y el significado de las palabras resulta más beneficiosa la escritura a mano. Ahora bien, se destaca la importancia de emplear métodos de aprendizaje flexibles y vinculados a los intereses del alumnado.