Mariana Clucellas es, actualmente, Coordinadora de Formación en el Instituto Internacional de Planeamiento de la Educación (IIPE), un organismo de la UNESCO para el impulso de la Educación en América Latina y Caribe. ÉXITO EDUCATIVO ha entrevistado a esta argentina licenciada en Ciencia Política de la Universidad de Buenos Aires, magíster en Educación de la Universidad de Harvard y con una larga experiencia en programas educativos en la región. Con ella hablamos de su importante labor para paliar el impacto de la pandemia en la educación de millones de niños y niñas en Latinoamérica y de los proyectos puestos en marcha para conseguir reducir la inequidad y aproximar a los centros educativos a la consecución de los Objetivos de la Agenda 2030.
¿Cuáles son las funciones del IIPE?
La principal función del IIPE es fortalecer las capacidades de los Estados miembros de la UNESCO para planificar y gestionar sus sistemas educativos en consonancia con los Objetivos de la Agenda 2030. Esta función constituye un inmenso desafío, ya que si bien cada vez son más los niños, niñas y jóvenes que asisten a la escuela, las desigualdades persisten – especialmente en América Latina, que suele presentar niveles de inequidad muy profundos y que se han agudizado a partir de la pandemia.
En ese sentido, desde el IIPE aportamos un marco referencial del planeamiento y la gestión educativa que integra la intersectorialidad como aspecto clave, y hace especial énfasis en la equidad, la calidad y la inclusión como principios irrenunciables de los sistemas educativos de sus Estados miembros. También trabajamos el proceso de planeamiento considerando la complejidad de lo social y la importancia de generar acciones flexibles y adaptables, brindando respuestas rápidas y contextualizadas para que la política pública dialogue con la realidad de las instituciones educativas y de todos los actores en la “cadena” de implementación. Con este abordaje, el IIPE busca también contribuir a la resiliencia y la sostenibilidad de los sistemas educativos.
Cuéntenos lo más importante sobre los programas de formación del IIPE, por favor.
Uno de los objetivos clave del IIPE UNESCO es apoyar a los gobiernos para que puedan mejorar sus procesos de planeamiento, entendiendo la efectiva implementación de las políticas educativas como una dimensión indisociable de ese proceso.
Para esto no solo la formación es un factor clave; sino que es aún más importante el tipo de formación. En ese sentido, en el IIPE nos enorgullecemos de brindar una formación anclada en los últimos avances sobre procesos de planeamiento, implementación, trabajo con actores intermedios (gobiernos locales, supervisión o middle tiers), liderazgo escolar, pero también eminentemente práctica y vinculada con el día a día de quienes tienen a cargo no solo la toma de decisión en sus ministerios de educación sino también de quienes lideran esos procesos en territorio. Por eso hablamos de “formación situada”, es decir, una formación que responde a cada contexto específico, justamente para garantizar que el planeamiento no quede “divorciado” de lo que ocurre en la práctica.
Cada año abordamos el planeamiento y gestión educativa como eje, y proponemos profundizar en algunos temas más específicos de política educativa clave para la agenda regional y mundial. Así, por ejemplo, ofrecemos cursos y programas centrados en el planeamiento en contextos de crisis; en políticas de atención a la primera infancia; en políticas docentes y de evaluación; en políticas digitales; en el uso de la información en el planeamiento educativo; entre otros temas que son centrales para los sistemas de educación.
¿Ofrecen algún programa concreto de formación para directivos educativos?Principalmente, la oferta está dirigida a autoridades y equipos técnicos responsables de la educación en la región, tanto del sector gubernamental como no gubernamental, a nivel nacional y subnacional.
No obstante, entendemos que para lograr cambios reales es clave trabajar con actores intermedios en la cadena de implementación, porque –al final del día–los equipos directivos son también planificadores e implementadores de las políticas. Son actores que no solo ejecutan políticas, sino que al interpretarlas y ponerlas en diálogo con las necesidades locales, en cierto modo las reformulan, idealmente respetando el sentido más general de cada política. Por eso, por ejemplo, desde el IIPE trabajamos en acciones de formación y cooperación técnica con actores intermedios, atendiendo las necesidades de cuadros técnicos más locales, desde directores distritales, comunales y municipales hasta personas a cargo de la supervisión.
Recientemente The Economist calificaba de “desastre global” la pérdida de aprendizaje por culpa del COVID en todo el mundo y aseguraba que sus consecuencias negativas no hacen más que sumarse. ¿Hay alguna forma de evaluar cuántos años de estudios han perdido generaciones enteras en todo el mundo?
Es muy válido el planteo, porque la cuestión de la pérdida de aprendizajes es un debate que ya se venía dando a nivel mundial y a nivel regional incluso antes de la pandemia, y ya venía preocupando (con razón) a los ministerios de Educación. Y, al igual que como ocurre con la inequidad “intrapaís”, la pandemia lo que ha hecho es agudizar esas pérdidas de aprendizajes.
Creo que la pregunta es muy interesante para llevarnos a reflexionar sobre la forma en que las escuelas venían enseñando y lo que enseñan actualmente, como para que esa pérdida de aprendizajes sea tan generalizada. Es decir, si yo tengo un aula de 35 estudiantes, de los cuales –en contexto de “normalidad” o previo a la irrupción de la pandemia–, 30 no logran aprender los contenidos mínimos, cabe preguntarse si la responsabilidad es del estudiantado, del equipo docente, o del sistema en su conjunto.
¿Cuánto de la perdida de aprendizaje es atribuible a las diferentes políticas a las que se vieron forzadas los gobiernos para mitigar los efectos de la pandemia en la salud y cuánto es atribuible a la forma en que ya se venía enseñando?
Son muchos los interrogantes que abre este tema, y es fundamental construir respuestas en conjunto. Por eso este año el IIPE centra su Foro Regional de Política Educativa en torno a una pregunta clave: cómo abordar la crisis de aprendizaje en América Latina y el Caribe. Representantes de gobiernos, de la sociedad civil y especialistas de organismos internacionales y del mundo académico se reunirán, del 4 al 6 de octubre, para debatir y revisar cuáles han sido los supuestos, aciertos y errores en la implementación de las políticas de mejora de los aprendizajes.
Latinoamérica tiene muchas cosas en común, pero es obvio que hay también grandes diferencias en la situación educativa por países. ¿Qué políticas podrían servir de estímulo o de ejemplo a los países de la zona?
Específicamente, con el fin de promover la toma de decisiones basadas en evidencia, desde la Oficina para América Latina y el Caribe del IIPE UNESCO ponemos a disposición de todas las personas el Sistema de Información de Tendencias educativas en América Latina – más conocido como SITEAL.
SITEAL es un repositorio de información que sistematiza documentos oficiales de políticas y normativas provenientes de los ministerios de educación y organismos afines, encuestas permanentes de hogares de los países de la región, e investigaciones del campo académico latinoamericano. Y lo más importante, esta plataforma tiene dos ventajas únicas: la primera es que su acceso es público, cualquier persona que quiera acceder a estos datos puede hacerlo, y por lo tanto contribuir a la difusión de buenas prácticas en planeamiento y gestión de la educación. La segunda es que, como se nutre de las Encuestas permanentes de hogares o relevamientos anuales de los países, se actualiza con mucha más periodicidad que sitios oficiales de censos o relevamientos que se realizan cada cinco e incluso diez años. Esta ventaja es particularmente importante en un mundo con cambios cada vez más rápidos.
Así, desde SITEAL fomentamos una mayor comprensión sobre los sistemas educativos y promovemos a contribuir al derecho a la educación.
¿Los estudios e informes que realizan sobre la educación en el área de América Latina y el Caribe, son útiles, los gobiernos de los diferentes países los tienen en cuenta a la hora de planificar y poner en marcha sus políticas educativas?
En el contexto actual, la necesidad de planificar la educación para construir sistemas educativos resilientes e inclusivos quedó más expuesta que nunca. Por eso, desde el IIPE promovemos la gestión y movilización de conocimientos sobre planificación y gestión educativa, para enriquecer el debate, evidenciar tendencias actuales en la región e identificar desafíos nacionales y regionales que apoyen a la toma de decisiones. Así, no solo producimos y distribuimos conocimientos, sino que incentivamos su uso activo por parte de los ministerios de educación, promocionando el planeamiento y la gestión de políticas basadas en evidencias.
Esto lo hacemos a través de la difusión de estudios e informes especializados, pero también a través de otras acciones, como el Foro Regional de Política Educativa que realizamos cada año sobre un tema vigente en la agenda educativa; la Red de Especialistas en Política Educativa de América Latina, que es una comunidad en la que funcionarios y especialistas de toda la región acceden a información relevante e intercambian conocimientos; el desarrollo de eventos virtuales; y las mismas formaciones del IIPE sobre las que comentaba, que son espacios en los que todos estos recursos son de gran importancia.
Por ejemplo, en unas semanas lanzamos un nuevo Curso sobre el uso de la información para el planeamiento educativo, que tiene como objetivo aportar un conjunto de herramientas conceptuales y prácticas para fortalecer el uso de la información estadística en el planeamiento de los sistemas educativos. Este curso está destinado exclusivamente a funcionarios, especialistas y profesionales de la educación que se vinculan con la producción y el uso de información educativa, y brindamos becas a todos los países hispanohablantes de la región para garantizar que estos conocimientos, elementales en la época que vivimos, lleguen a cada uno de los ministerios de educación.
La pandemia de COVID-19 ha roto cualquier planificación educativa previa. En términos generales, ¿cómo diría que ha sido el impacto en Latinoamérica?
Debo decir que no estoy del todo de acuerdo con esta afirmación. Creo que, más que “romper cualquier planificación educativa”, diría que la pandemia puso de relieve el desfase que existía entre una forma de hacer planeamiento –más tradicional y muy arraigada en la mayoría de los países del mundo – y la implementación. En síntesis, la pandemia demostró cuanto más importante se vuelve el planeamiento en situaciones de crisis, para responder con rapidez y eficacia y para garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad.