FSIE manifiesta una enorme preocupación por las formas y el contenido del Proyecto de Reforma de la LOE presentado por el Gobierno y el Ministerio de Educación y Formación Profesional.
El sindicato no comparte la urgencia que, según el Ministerio, justifica la presentación de esta nueva reforma en un contexto político incierto e inestable. Es una iniciativa sin diálogo ni consenso alguno en la que prima el interés partidista y electoral sobre la verdadera mejora del sistema educativo.
Lo urgente y necesario, admiten, es alcanzar un Pacto educativo que evite este tipo de iniciativas que no contribuyen a la estabilidad y tranquilidad del sistema. No desean un contenido que se desprenda claramente una decisión política de perjudicar la enseñanza concertada considerándola subsidiaria de la pública al establecer que, por encima del derecho a la libre elección de centro que les corresponde a los padres, sean las administraciones quienes planifiquen y oferten plazas públicas suficientes para todos. Es una forma más de asfixiar a la enseñanza concertada.
Entre las medidas incluidas en el texto que FSIE considera especialmente preocupantes para el sector destacan:
- Vulnera el derecho de los padres a elegir que sus hijos reciban la formación religiosa más acorde a sus principios, incumpliendo además los vigentes Acuerdos con el estado del Vaticano.
- Propone excluir de los conciertos a la educación diferenciada, lo que claramente abre la puerta a que más tarde sean otro tipo de centros los que queden excluidos.
- Dificulta al máximo que los docentes y el PAS puedan matricular a sus hijos en los centros en los que trabajan.
- Permite que se puedan obtener títulos con suspensos.
- Elimina la Mesa Sectorial de la enseñanza concertada.
- Introduce injustificadamente un representante del ayuntamiento en los consejos escolares de centros concertados, hecho que no supone en sí mejora alguna para el sistema educativo y además mete a los partidos políticos en un espacio reservado tradicionalmente a agentes implicados en la educación.